Un lugar con mucha historia y encanto

El edificio es impresionante, con un ambiente que te transporta al pasado. las habitaciones son amplias, y la decoración, aunque clásica, añade un toque especial. Sin embargo, el horario del desayuno es un poco temprano, especialmente para quienes buscan descansar más.

San Antón Abad es un lugar ideal si estás en el Camino. La ubicación es perfecta, justo debajo de la colina antes de la subida de Montes de Oca. Me encantó la habitación, ¡muy amplia y con un baño de lujo! El hotel tiene una decoración clásica que te transporta a otra época. La cafetería exterior es un bonito lugar para relajarse.

lo puedo recomendar

Amplias habitaciones con un baño de lujo.

El baño carece de calefacción y la ducha no tiene un colgador adecuado, lo que dificultó mi comodidad. La decoración no es del todo llamativa y puede resultar un poco anticuada para algunos. Además, la selección de desayuno era limitada y no satisfizo mis expectativas, especialmente para un lugar que espera acoger a peregrinos y viajeros cansados.

Desayuno delicioso y variado.

Recomendaría este lugar para una visita de paso

Espacioso hotel, encantadora cafetería con mesas al aire libre, perfecto para relajarse después de un día de exploración.

No podría haber estado más feliz.

el san antón abad cuenta con un personal que se preocupa por el confort de sus huéspedes, facilitando desayunos tempranos para quienes continúan su camino. el ambiente es acogedor, ideal para socializar con otros peregrinos, rodeado de un entorno encantador.

la decoración podría actualizarse un poco. 🕰️

El edificio algo descuidado, pero el ambiente medieval y la comida son impresionantes.

hermoso edificio, buena comida, algo descuidado

Descanso tranquilo en un entorno histórico.

la habitación era amplia y cómoda, y la limpieza fue impecable. el desayuno incluía bollería casera que realmente me encantó durante mi noche aquí.

falta un colgador en la ducha.

Habitaciones grandes y cómodas. Cena temprano, no alcanzamos a probar el restaurante.

El hotel tiene una terraza al sol muy agradable y el desayuno buffet estaba riquísimo. Aparte, la habitación era amplia, perfecta para nuestra familia, y el personal muy atento. Nos encantó el ambiente acogedor, sobre todo viajar con el bebé.

A mis hijos les habría encantado que hubiera un área de juegos para que se divirtieran más.

el baño no tenía calefacción, pero la habitación era muy amplia y limpia. el personal fue muy amable y la cena estuvo deliciosa (los platos combinados son un acierto! ). el desayuno era abundante y variado, ¡no te lo puedes perder!

una experiencia mágica en un antiguo hospital convertido en hotel lleno de encanto y confort junto al camino

Esta joya histórica ofrece habitaciones cómodas y una atención al cliente excepcional, además de un desayuno buffet delicioso que te prepara para un día de caminata. ¡Una parada imprescindible!

El lugar es encantador, la decoración te transporta a épocas pasadas y las habitaciones son muy amplias y limpias. La atención del personal es magnífica, siempre amables y dispuestos a ayudar. Sin embargo, la variedad del desayuno podría ser mejor y el acceso a algunos espacios comunes resulta un poco complicado, especialmente para personas con movilidad reducida.

La habitación era amplísima y muy cómoda. La decoración, más clásica, le da un toque especial. El baño era grande y la limpieza estuvo impecable. Pude descansar sin ruidos, lo cual fue genial. Solo me faltó un colgador en la ducha, pero en general, la experiencia fue muy buena.